El maltrato en la vejez, es quizás de los últimos maltratos a resaltar en los finales del siglo XX. Este fue descrito en la década de los ochenta. La Organización Mundial de la Salud lo define como: el maltrato de las personas mayores es un acto único o repetido que causa daño o sufrimiento a una persona de edad, o la falta de medidas apropiadas para evitarlo, que se produce en una relación basada en la confianza. Este tipo de violencia constituye una violación de los derechos humanos e incluye el maltrato físico, sexual, psicológico o emocional; la violencia por razones económicas o materiales; el abandono; la negligencia; y el menoscabo grave de dignidad y la falta de respeto.
En el último año, aproximadamente 1 de cada 6 personas mayores de 60 años sufrieron algún tipo de abuso en entornos comunitarios. Las tasas de maltrato a personas mayores son altas en instituciones como residencias de ancianos y centros de atención de larga duración: dos de cada tres trabajadores de estas instituciones indican haber infligido malos tratos en el último año. El maltrato físico puede ser de graves lesiones físicas y consecuencias psicológicas prolongadas. La población mundial de mayores de 60 años se duplicará con creces, de 900 millones en 2015 a unos 2000 millones en 2050.
Los factores de riesgo asociados al maltrato son a nivel individual, a nivel social, comunitario y sociocultural.
A nivel individual se incluye: la mala salud física y mental de la víctima y los trastornos mentales y no recibir los cuidados apropiados para estas condiciones. Por género se ha observado en algunas culturas que las mujeres tienen una condición social inferior, tienen mayor riesgo de negligencia y abuso económico (como apoderarse de sus propiedades) cuando enviudan. Las mujeres pueden también correr un mayor riesgo de sufrir formas más persistentes y graves de maltrato y lesiones.
A nivel social al compartir su vivienda con miembros de la familia, hijos adultos, cónyuges que podrían maltratar: desde violencia verbal, psicológica, financiero u otras formas de maltratos. A nivel comunitario, algunas personas mayores, viven solas, se encuentran aisladas y sus familiares y parientes no le dedican el tiempo suficiente, aumentando el maltrato. Entre los factores socioculturales se podría mencionar que pueden afectar al riesgo del maltrato como estereotipos o mitos basados en la edad como frágil, débil y dependiente, el alejamiento de los hijos y sustituyen sus responsabilidades y cuidados por personas extrañas o cuidadores o ingresan en instituciones, hogares de ancianos donde el personal lo maltrata.
¿Podemos prevenir este tipo de maltrato?
Aunque a nivel mundial se sabe poco sobre el maltrato en la vejez, pues muchos de ellos prefieren callar por diversas razones, entre sentirse avergonzados y otros se encuentran enfermos y no pueden denunciar el maltrato que reciben.
Sí, se puede prevenir, tomando medidas como: campañas de sensibilización para el público, intervención de apoyo a los cuidadores, políticas públicas, y programas intergeneracionales con poblaciones jóvenes. Es por esta razón que La Asamblea General de las Naciones Unidas, en su resolución 66/127 designa el 15 de junio como Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez. La celebración de este día sirve para que todo el mundo exprese su oposición a los abusos de nuestras generaciones mayores.
¡El maltrato en la vejez debe desaparecer en estos tiempos!
Referencias:
1. Maltrato de las personas mayores. 8 de junio de 2018 . Organización Mundial de la Salud. Consultado el 7 de junio de 2020. Disponible en: https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/elder-abuse
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